sábado, 30 de junio de 2012

El que se quema con leche…


Puede haber trabajadores sin patrones; pero patrones sin trabajadores no…”  Este es un grafiti que leí hace algún tiempo, en alguna pared de algún lugar… Y es toda una definición de principios ideológicos. Cuando, desde distintos estamentos estatales y privados, nos dicen: “Estamos salvando los puestos de trabajo”, los que pensamos la realidad desde aquella postura ideológica, escuchamos: “Nos estamos salvando a nosotros mismos. No es por amor a los trabajadores, es que sin trabajadores no podemos existir.”
Desde que el Estado entrerriano decidió “salvar” los puestos de trabajo de la firma CO.TA.PA. (Cooperativa Tambera Paraná Limitada.), siempre respetando el  sentido piramidal del universo laboral que ellos manejan y respetan a rajatabla, la incógnita estuvo presente: ¿Van a premiar con  el dinero del Estado a los mismos que la quebraron?
Les propongo repasar, muy sintéticamente,  la historia: CO.TA.PA es una de las tantas empresa que, cobijada bajo el mote de “cooperativa” cuando de cooperativa tienen poco, viene funcionando en nuestra provincia. Lo de la careta cooperativista se ha repetido muchas veces a lo largo del tiempo y del territorio nacional, por lo inescrupuloso del empresariado y la mórbida vista gorda del Estado.
 El proceso de quiebra de la firma láctea, que cuenta con 130 empleados, comenzó en 2006. El principal acreedor, de un total de 126, era el Estado entrerriano en una cifra que rondaba los 8 millones de pesos (en concepto de carga impositiva impaga). La deuda total se estimaba en 16 millones de pesos de los cuales 1 millón (año 2010) era en concepto de sueldos atrasados.
El 20 de enero de 2009, el gobernador Sergio Urribarri dio a conocer la intención de intervenir para “rescatar”  la firma incorporando al Estado provincial como socio mayoritario. Después del proceso legislativo y legal pertinentes (con sus idas y venidas de rigor), el 21 de junio pasado, la Jueza Valentina Ramírez Amable homologó el acuerdo entre el Estado provincial, municipalidad de Paraná y Cotapa para crear una empresa láctea de capital mixto mediante la capitalización de deudas fiscales. Se fijó un plazo de 120 días hábiles para constituir la nueva firma que usará la marca COTAPA.  Se mantienen los puestos de trabajo y la antigüedad de los 130 empleados de la firma. Un detalle no menor es que la justicia también dictaminó que los honorarios profesionales que percibirán tanto los abogados como los contadores que intervinieron en el proceso fueron fijados en un total de 412 mil pesos.
¿Y si nos hubiéramos  olvidado por una vez de la bendita pirámide y el estado hubiera formado una VERDADERA cooperativa de trabajo, otorgándoles el control a los trabajadores para que auto gestionen la empresa? Al que piense que esto es inviable, le recomiendo que se dé una vueltita por acá: http://www.obrerosdezanon.com.ar/
Ahora tenemos que el presidente actual  de COTAPA es Marcelo Ferrer, quien fuera  gerente general de la firma hasta el salvataje estatal; o sea: partícipe necesario de todo este penoso proceso. Una consultora multinacional como BDO, contratada por el Estado entrerriano, seleccionó al nuevo gerente general  Ing. Guillermo Lerenze, oriundo de Concepción del Uruguay, que egresó como ingeniero químico de la Universidad Nacional del Litoral en 1987 y en 1999 completó un Master en Administración de empresas en la Universidad de El Salvador.  Pero, este último, renunció el 21 de septiembre de 2011,  quedando vacante el puesto sin novedad hasta el momento. Según han informado distintos portales de noticias de la provincia, el nuevo hombre fuerte de la compañía es Lisandro Luna de Lucca, director en representación del Estado y persona del círculo íntimo del ministro de la Producción, Roberto Schunk.
Todas nuestras esperanzas estarán puestas en el Tribunal de Cuentas que debe controlar los números de la flamante S. A. láctea.


Pero, como si todo esto fuera poco, se abre un nuevo capítulo en esta historia y es que, tanto la directora de la Escuela Normal Superior Doctor Antonio Sagarna, Prof. Claudia Navarret, como el director de la escuela N°129,  Duilio Mandirola, han realizado declaraciones públicas, dando a conocer lo ocurrido el martes 19 de junio pasado en una reunión con los directores de los establecimientos educativos del departamento y el  Director de Comedores Escolares de la provincia de Entre Ríos, Mariano Nuñez. Según lo relatado por estos directivos, en dicha reunión, que calificaron como “tensa”, se les informó que cambiaría el sistema de entrega del R.A.N. (Refuerzo Alimentario Nacional). A partir de julio, y por un convenio firmado entre SIDECREER y la flamante COTAPA SA, dejarían de percibir el dinero vía tarjeta y, a cambio, recibirán el nuevo producto a base de leche en polvo, azúcar y cacao fortificado con hierro, zinc y vitamina C, que COTAPA S.A. comenzó a elaborar especialmente para los comedores escolares, y que se presentara en sociedad, por parte del gobierno entrerriano y la empresa, oficialmente el 18 de junio pasado en las ciudades de Gualeguay, Victoria y Diamante.
Al respecto, Duilio Madirola dijo, en declaraciones al www.darionogoyá.com.ar:
“Era evidente que lo que pretendían que en esa reunión se firmase el convenio. Muchos directores de Nogoyá no firmamos porque el convenio no estaba claro. Creemos que si hay que salvar una empresa, no se debe hacer con el dinero de planes nacionales, más si se destinan para la comida de los chicos.”
“Ellos dicen que esa leche es fortificada, por lo que supliría todos los alimentos que le estábamos dando a los alumnos, pero la verdad es que eso no es convincente para nada”
“En la reunión estaba el director provincial de comedores escolares, el subsecretario de planeamiento alimentario, el intendente Pavón, el Sr. Romero de Acción Social y otros funcionarios. Además todos los directores del departamento.”
“Evidentemente era un mandato político venir y lograr que este convenio sea firmado por todos los directores. Desconozco si alguien firmo, y no sabemos qué sucederá  con quienes no firmamos porque nos dijeron que verían que medidas tomaban con nosotros.”
“Hemos enviado una nota y espero que esto se revea, que la palabra de los directores sean escuchados. Trataremos que este convenio no se lleve adelante y poder mantener la merienda y desayuno como lo veníamos haciendo en ésta institución”
Entre tanto, la Prof. Claudia Navarret, dijo lo suyo a www.adn24.com.ar:
“…la leche, el chocolate y el azúcar me van a mandar el preparado a la Escuela, la duda nuestra es si lo vamos a tener todos los días, como es el tema de transporte para que llegue a la puerta de la escuela, nos van a enviar por mes $0.50 por alumno para comprar, en 100 o 120 alumnos que tenemos declarados por las necesidades de urgencia, saquen la cuenta 120 alumnos por $0.50 son $60, nosotros estamos gastando $1600, $1800 de galleta por mes. Porque el justificativo del Director de Comedores,  Mariano Núñez, nos dijo que la planta Cotapa ahora es o la absorbió el gobierno, esa es la empresa que nos va a mandar lo que ellos producen…
…Nuestra preocupación y la de todos los padres es que con una taza de leche está bien, tendrá su alimento, pero la galleta cuando todos sabemos que algo sólido es necesario. Nosotros tenemos alumnos que ingresan a la escuela a las 07:00 hs, a veces sin desayunar, con estos días hasta las 13.00 hs. que se van, solamente con una taza de leche.”
Acá, como mínimo, hay olor a leche cuajada…
¿Se pretende usar el dinero que la Nación le envía a la Provincia, para que a su vez esta lo distribuya a todos los comedores escolares, para mantener viva a una empresa que sigue manejada (por lo menos en parte) por los mismos que la fundieron…?
Solo para tener en cuenta algunos números, que representan a niños de carne, hueso y estómago; niños comprovincianos nuestros  que ven en la escuela una alternativa (en muchos casos la única) de hacer pasar algo, más o menos sustancioso, por el sistema digestivo: En la provincia 133.543 alumnos reciben la copa de leche. La ayuda alimentaria se distribuye en 1.536 comedores. Para sostenerlos, el aporte mensual es 1.938.460,57 pesos, de los cuales un 85 por ciento es costeado por la Nación. También funcionan 998 comedores, al los que asisten 86.467 chicos. En este caso, la inversión mensual ronda los 3,3 millones de pesos, aunque si se agregan los comedores infantiles y de ancianos el volumen mensual que se destina supera los 5 millones de pesos.
¿En qué cabeza cabe pensar que es genuino manotear el dinero destinado al refuerzo alimentario de los niños en situación de riesgo de desnutrición, para impulsar una S.A.? S.A. con mayoría del estado en un 52%, pero con socios privados que nadie conoce…
Desde este humilde rincón de la web, hago un llamado a TOD@S los que, directa o indirectamente se vean o sientan afectados, a no callarse y hacerse oír y ver…
 "Tendremos que arrepentirnos en esta generación, no tanto de las malas acciones de la gente perversa, sino del pasmoso silencio de la gente buena..." 
                                                                                                               Martin Luther King

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