Y una vez más, aquí estamos… La
democracia al estilo argento nos ha depositado en este 2019, en un escenario…
¿Cómo decirlo?: “Particular”…
Estas humildes líneas, apenas
hilvanadas entre sí, pretenden ser solamente un disparador para que cada cual
saque sus conclusiones. Principalmente, de cara a la elección municipal que
promete un final apasionante.
En Nogoyá somos pocos y nos
conocemos bastante bien, más allá de los prejuicios, comentarios mal
intencionados, fabulaciones de toda calaña y demás zancadillas retóricas. Si
bien es cierto que el ciudadano común no suele acceder a las agachadas, enrosques,
tejes y manejes de los nogoyaenses que han optado por someterse al escrutinio
público, también a estos compueblanos les conocemos el andar. Y la tremenda
polarización que quedó demostrada en las elecciones P.A.S.O., nos simplifica la
ecuación a la mínima expresión, con dos opciones: El actual presidente
municipal Rafael Cavagna o el Diputado Provincial Daniel Koch.
El Presidente Municipal Dr. Rafael Cavagna, capitalizando políticamente y en plena campaña, un iniciativa ciudadana en "La Alameda" |
El primero de ellos es el actual
titular del ejecutivo municipal, que accedió al cargo luego de cuatro años como
concejal y dentro de la alianza Cambiemos. Surgido del Radicalismo, podemos
decir que, si hubiera surgido del Pro, a nadie le extrañaría. El Radicalismo
local no se ha caracterizado por su progresismo, salvo en los albores de la
democracia, cuando se seguía la corrección política coyuntural, durante el
gobierno alfonsinista.
Es un poco irresponsable
calificar una gestión municipal con una sola palabra, pero con la gestión del
Dr. Cavagna me voy a arriesgar: creo que la palabra es “mediocre”. Si a esto le
sumamos el descalabro (siendo educados) de la gestión nacional, el panorama
para el oficialismo municipal, no es muy alentador.
El Dip. Prov. Daniel Koch junto a un cartel anti derecho al aborto, que fue el lanzamiento de su campaña 2019. |
Y en el otro rincón nos
encontramos con el Diputado Provincial Daniel Koch. Rotundo ganador de la
interna peronista, pone en un dilema a los sectores más progresistas de este espacio. Más allá de que ha demostrado ser bastante torpe políticamente hablando,
debemos sumarle su notoria homofobia, su militancia anti derecho al aborto,
adepto a la teoría de los dos demonios y asiduo a mostrarse gustosamente
cercano a la jerarquía eclesiástica católica, representa un sapo duro de
digerir para un numeroso grupo de peronistas, sobre todo jóvenes y mujeres. El eterno
dilema del peronismo que oscila entre la derecha y la izquierda
intrapartidaria. Esta vez, el péndulo se detuvo a la derecha. Pero no me voy a
meter en semejante embrollo, que ha llenado bibliotecas enteras, en este
momento. Solo lo señalo porque esta situación logra darle esperanzas al
oficialismo municipal gobernante.
Las P.A.S.O., más allá de que
cada sector hizo la lectura que mejor le cuadraba, ya dieron una idea de lo que
puede suceder en las generales del 9 de junio. Pero no es mi intención hacer
futurología; mi intención es dejar en claro que, como quedó dicho al comienzo
de estas líneas, la gran polarización nos ha arrojado a optar entre dos
opciones conocidas, como casi siempre, pero no únicas. Lejos, muy lejos
quedaron l@s candidat@s del M.S.T. (Nueva Izquierda), en el cuarto lugar
sorprende SER (conformado por sectores religiosos) y en quinto lugar el Partido
Socialista.
En definitiva, el horizonte se presenta mediocre o rancio…
Ya sé que es un poco desalentador, pero ya lo dijo el
maestro Joan Manuel Serrat: “Nunca es triste la verdad, lo
que no tiene es remedio…”
No hay comentarios:
Publicar un comentario